Un grupo de 20 voluntarios de Nueva Acrópolis llevo a cabo una actividad en un refugio de animales donde pudieron recolectar alimentos, utensilios de baño y mucho cariños a diversos animales rescatados.
Un grupo de voluntarios dedicados a ayudar y cuidar a los más necesitados han trabajando incansablemente para recolectar alimentos, además de realizar baños y juegos que pudieron compartir con los animalitos, brindando atención y amor a aquellos que han sido víctimas del abuso y la negligencia de sus dueños.
Allí, los voluntarios dedicaron su tiempo y esfuerzo para asegurarse de que los animales se recuperaran y recibieran el amor y la atención que merecían. Los voluntarios también trabajan para educar a la comunidad sobre la importancia de tratar a los animales con respeto y cuidado.
En ese sentido, el trabajo de estos voluntarios dedicados está ayudando a marcar una diferencia significativa en la vida de los animales en Honduras. Por lo que, la dedicación y compromiso son un ejemplo de cómo los acropolitanos pueden hacer una diferencia positiva en el mundo.


